Puede que nos cepillemos los dientes tres veces al día, o que usemos todos los accesorios que creamos que debemos usar. Pero eso no es suficiente para tener una buena higiene oral.
Nuestro dentista en Lorca muchas veces se encuentra con pacientes que dicen mantener una buena higiene bucodental, pero que realmente no tienen una buena técnica de cepillado. Esto suele pasar más de lo que parece, así que hemos decidido escribir este artículo para orientar en cómo debe ser un buen cepillado dental.
Elegir el cepillo dental, la primera tarea
Nuestra higiene dental comienza mucho antes de colocarnos frente al espejo. Y es que la boca de cada paciente es única y puede que el cepillo que le va bien a tu pareja o a tu hijo no sea el mejor para ti. Por eso debemos pedir consejo al dentista, quien realmente conoce nuestra boca. Él nos aconsejará qué tipo de cepillo usar (eléctrico o manual) y qué características son las mejores que puede tener para que nuestra higiene oral comience, al menos, con garantías.
Sí es cierto que existen algunas generalizaciones, como que debemos huir de los cepillos de cerdas duras y de aquellos con un mango corto o difícilmente manejable.
La pasta dental, ¿cuál es la buena?
Seguro que si te has parado a buscar pasta dental en un supermercado o en una farmacia habrás notado que hay tanta variedad que hasta marea. Nuevamente debemos escuchar a nuestro dentista. Generalmente, las pastas fluoradas serán siempre las más ideales para cuidar de nuestros dientes. Pero por condiciones como periodontitis, halitosis o fluorosis, quizás los expertos de nuestra clínica dental en Lorca te recomienden un dentífrico muy específico para ti.
¿Cuál es la técnica correcta para un cepillado exhaustivo?
Lo primero es tener claros los tiempos y las zonas: un cepillado ideal es el que dura entre 2 y 3 minutos y cuyos tiempos están repartidos de forma equitativa por todas las partes de nuestra arcada.
Para organizarnos bien, dividiremos nuestra boca en cuatro zonas: las dos mitades de la arcada superior y las dos de la inferior.
Empezaremos siempre por la parte superior, con movimientos suaves sin ejercer presión, en forma circular desde la encía y hasta el borde del diente. Lo haremos durante 15 segundos por la parte frontal de cada zona y otros 15 por la parte anterior. Luego pasaremos a la otra zona de la arcada superior y repetiremos el proceso.
Una vez completado, haremos lo mismo en la arcada inferior.
Evidentemente, dependiendo de si usamos cepillo eléctrico o normal la técnica puede sufrir ligeras variaciones. La más importante es que el cepillo eléctrico se apoya en el diente y no se “barre” con él. Es clave que nuestro dentista nos haga una pequeña demostración de cómo cepillarnos los dientes.
¿Qué cumplimenta un buen cepillado dental?
Una vez hemos cepillado nuestra boca, el trabajo no está hecho. Tenemos muchos accesorios como el hilo dental, el cepillo interdental, el raspador dental, el irrigador dental o los colutorios para que nuestra boca tenga una limpieza de 10. Puedes leer más en nuestro artículo sobre el kit dental perfecto.
Y recalcamos, si tienes muchas preguntas, no dudes en pedir cita a nuestra clínica dental en Lorca.